lunes, 20 de febrero de 2012

Haz de tu vida un sueño y de tus sueños una realidad.

Una princesa... En buen sentido. Ser una princesa, entera de rosa. Aunque eso ahora me parezca una tontería, volver al pasado nunca está mal. Y poder a ver mi sonrisa frente a un espejo... Jugar con mis viejas casitas de muñecas. Imaginar que puedo volar saltando de la cama al suelo... Cuando pienso en todo eso, no puedo ver de qué color era el cielo, por que está todo en blanco y negro. Supongo que sería más azul... Todo tendría más color. Cuando uno crece, los colores se destiñen. Hasta que llega el punto que ni sabes de qué color es una naranja, por que, ¿para qué te ibas a fijar en su color? Tenías papeles que firmar más importantes. No sabes cuando estás feliz. Ni triste. Siempre hay un problema que arreglar. Y cuando tenías 6 años te tirabas jugando toda la tarde, y luego tu madre se asomaba por la puerta de tu cuarto y te decía que ibas a merendar pan con nocilla. Cosa que no puedes comer ahora porque engordas y te salen espinillas. Quien no daría un riñón por volver a ser así. Sin preocupaciones...

No hay comentarios:

Publicar un comentario